El estrés es malo para todos. Incluso para nuestras mascotas. Los gatos, por ejemplo, son animales que se pueden estresar con cambios o situaciones que para nosotros no tengan importancia. Por ello, debemos estar atentos a las señales que nos pueden indicar que nuestro michi está estresado. No solo porque influye en su bienestar, sino porque también puede afectar a su salud. Ana Ramírez, directora técnica veterinaria de Kivet, la red de clínicas veterinarias de Kiwoko, nos explica cómo reconocer que un gato lo está pasando mal, las causas y qué hacer para calmarlo.
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¿Cómo sé que mi gato está estresado?
Entre las señales más comunes de estrés en gatos se pueden encontrar, nos cuenta la veterinaria:
- Cambios en el comportamiento, como esconderse.
- Agresividad inusual.
- Marcaje con uñas de forma intensificada.
- Pérdida de apetito.
- Vocalización excesiva.
- Cambios en los patrones de sueño, manifestándose en una menor cantidad de horas de lo habitual.
Observar estos signos puede ayudar a identificar y abordar el estrés en el felino.
¿Qué factores ambientales pueden contribuir a que se desencadene?
En entornos domésticos, factores como cambios en la rutina, ruidos fuertes, falta de enriquecimiento ambiental y presencia de otros animales pueden desencadenar estrés en gatos. También, la falta de lugares seguros o altos para descansar y la ausencia de interacción social positiva pueden favorecer el estrés.
Los cambios de rutina también pueden generar estrés en gatos. "Son animales de hábitos y cualquier alteración en su entorno o rutina diaria puede afectar su bienestar emocional. Es importante introducir cambios gradualmente y proporcionarles un ambiente enriquecido, a través de juguetes y mucha psicología gatuna, para contribuir a minimizar este estrés que puede derivar en consecuencias negativas en su salud", señala la experta.
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¿Existen juguetes que ayuden a aliviar el estrés en los gatos?
La veterinaria nos explica que hay varias opciones para aliviar el estrés en los gatos. "Juguetes interactivos como los tiovivos y juegos para atrapar a la presa, postes para trepar o rascar como el poste rascador para gatos o el rascador flamingo; y rompecabezas de comida como la pelota porta-golosinas, que pueden mantenerlos entretenidos y se encuentran disponibles en cualquier tienda KIWOKO".
También podemos considerar la idea de proporcionar escondites seguros y espacios elevados que les proporcionen espacio suficiente siempre que lo necesiten; así como nuevas texturas y aromas a través de juguetes con hierba gatera o mantas suaves puede ser beneficioso.
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¿Cómo funcionan los dispensadores de feromonas?
Los dispensadores de feromonas juegan un papel crucial en el alivio del estrés en gatos. "Estas feromonas ayudan a crear un ambiente familiar y seguro, reduciendo el estrés y promoviendo un comportamiento más calmado y confiado en los gatos. Su uso es beneficioso en situaciones como mudanzas, introducción de nuevos miembros en la familia o cambios en el entorno que puedan afectar a los felinos", indica.
Se pueden encontrar en diferentes formatos como el difusor enchufable, que vaporiza extractos naturales de valeriana y lavanda conocidas por sus propiedades calmantes; o spray, que pueden emplearse en caso de estrés ocasional.
Además, "existen snacks como los bocados elaborados a base de valeriana que brindan un efecto antiestrés, al mismo tiempo que promueven una calma natural y ayudan a reducir el mal comportamiento", añade.
Por otro lado, también disponemos de camas antiestrés para gatos que pueden ser muy beneficiosas al proporcionar un ambiente cómodo y seguro que ayuda a reducir el estrés del animal. "La elección de la cama adecuada dependerá de las preferencias individuales del gato, pero, para cualquier caso, es fundamental considerar factores como el material y la forma para asegurar la aceptación por parte del felino", aclara.
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De que otra manera podemos eliminar el estrés en gatos
Para aliviar el estrés en gatos, además de las opciones mencionadas, "siempre es aconsejable implementar áreas seguras elevadas, proporcionar escondites acogedores, establecer rutinas consistentes y asegurar un entorno tranquilo con suficientes recursos para liberar energía y poder tener su espacio de paz y tranquilidad", insiste Ana Ramírez.
También es fundamental el contacto físico suave y hablarles en tono calmado para fortalecer el vínculo entre el animal y el humano.
Por último, subraya la importancia de consultar a un veterinario o especialista en comportamiento felino cuando un gato experimenta problemas persistentes relacionados con el estrés, como cambios en el comportamiento, problemas de alimentación o problemas de salud aparentes. Un profesional puede evaluar adecuadamente la situación y brindar orientación específica para mejorar el bienestar del gato.
"Si detectamos estos problemas de comportamiento desde que el gato es joven, lo más es aconsejable empezar cuanto antes con el entrenamiento, ya que cuanto más joven es el animal, más fácil es corregir cualquier desviación que pueda afectar el bienestar del animal o la convivencia con el humano", concluye Ana Ramírez, de Clínicas Kivet.
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