Antes de decantarse por Francisco de Lizaur, según indican distintos medios, la Casa Real había barajado la opción de que la jefatura de Protocolo pasara a ejercerla una mujer, ya que de los 11 cargos que integran el equipo directivo de la Jefatura del Estado, solo hay una mujer, la interventora, Beatriz Rodríguez Alcobendas.