CONCIERTOS Y CAFÉ EN LA CATEDRAL
Más de mil años de historia tiene a sus espaldas la catedral de Chester, una imponente construcción normanda de color rojizo que fue en origen la abadía de un monasterio benedictino dedicado a Santa Werburga, patrona de la ciudad, y se levanta en la plaza del Ayuntamiento. Su interior tiene destacados tesoros: empezando por su biblioteca, con más de 5000 volúmenes, y continuando por el coro gótico y la sillería, el claustro vidriado o sus tranquilos jardines. Pero, al mismo tiempo, es un templo muy dinámico, que acoge exposiciones, conciertos de órgano, proyecciones y cuenta con el Café 1902, ubicado en el refectorio de los monjes, del siglo XIII.
Chartres, San Basilio, Santiago…, las catedrales más bonitas de Europa