Durante el acto, también hemos podido ver gestos similares: manos entrelazadas entre sí, saludos con la mano y miradas de complicidad, en un intento de transmitir con los ojos lo que no era posible hacer con las manos y los besos. Los saludos se han visto modificados hasta el punto de que el único contacto se producía por encima de la ropa, no directamente de piel a piel