"Está súper cambiado, está corriendo y habla. Pero no sé ni donde está... Estas son las cosas que me atormentan. No sé en qué casa está viviendo", ha comentado el uruguayo antes de romper a llorar al ver lo muchísimo que había crecido el pequeño después de tres meses separados, y ha aprovehado para dedicale unas bonitas palabras a la madre de su bebé, Adara Molinero.