Siempre hay una primera vez
Tal y como nos cuenta Jean Porsche, al introducir estampados en la decoración por primera vez, es fundamental pensar en qué elementos deseas que destaquen dentro de las mezclas, especialmente si no estás planeando realizar grandes obras en el espacio. Por ejemplo, en un salón, podrías comenzar con elementos más pequeños y menos permanentes, como cojines o cortinas. Arriesgarse a tapizar un sofá puede ser un paso más avanzado, ya que el proceso conlleva cierta destreza y experiencia, y un error podría estropear el mueble.
"Además, es importante tener en cuenta que hay múltiples frentes donde puedes introducir estampados: suelo, paredes, muebles e incluso el techo. Por lo tanto, te recomendaría estudiar un poco el espacio y reflexionar sobre qué cambios podrías realizar para que te sientas cómodo y satisfecho con el resultado final. Al planificar, considera qué áreas deseas destacar y cómo los estampados pueden contribuir a crear el ambiente deseado en tu hogar".
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