El TEATRO-MUSEO: COMIENZA EL ESPECTÁCULO
“¿Dónde, si no en mi ciudad, ha de perdurar lo más extravagante y sólido de mi obra, dónde si no?” son palabras del pintor para hablar de este Teatro-Museo diseñado por él mismo sobre los restos del antiguo teatro municipal. Todo en él es anárquico, onírico y transgresor, empezando por su emblemática cúpula geodésica (salvador-dali.org).
Inaugurado en 1974 y presentado por el genio como ”el mayor objeto surrealista del mundo”, el Teatro-Museo Dalí acoge la más notable colección del artista, unas 1.500 obras entre las que destacan famosos cuadros como El espectro del Sex-appeal (1932) o Autorretrato blando con beicon frito (1941). Por si fuera poco, el museo acoge también obras creadas por el artista para este espacio -como la Sala Mae West o el Cadillac lluvioso-, salas con montajes ópticos como las de la Torre Galatea o, incluso, la cripta con la tumba del pintor.
No es lo único, en su interior se descubren, además de pinturas, esculturas, grabados, instalaciones, hologramas, estereoscopias, fotografías… y no solo suyas, también pueden verse obras de otros artistas a los que invitó a exponer en su museo en vida.