Ayer fue una noche de cenas de gala en el mundo de la realeza. En Madrid, los reyes de España homenajeaban a sus altezas el jeque Tamim Bin Hamad Al Thani, emir del Estado de Catar, y la jequesa Jawaher Bint Hamad Bin Suhaim Al Thani. Una oportunidad en la que pudimos ver a doña Letizia brillar con un nuevo vestido semitransparente y con bordados metalizados. Por otro lado, a 3.146 kilómetros de distancia, en Estocolmo, se celebraba otro banquete en este caso con motivo de la visita de Estado del presidente de Finlandia, Sauli Niinistoe, y la primera dama, Jenni Haukio. Oportunidad en la, entre las invitadas royals, vimos fabulosa a Sofia de Suecia con un diseño vibrante y joyas con historia.
Un vestido inolvidable
Para esta cena de gala en el Palacio Real de Estocolmo, Sofia de Suecia quiso rescatar de su armario uno de sus vestidos más glamurosos, elegantes y fascinantes que tiene. En concreto, recicla un diseño en color rojo que se entalla estratégicamente al cuerpo mientras muestra en la fala un corte evasé que se prolonga en larga cola. Especialmente, llaman la atención sus mangas murciélago con efecto capa. Innovadora elección que pertenece a la firma Zetterberg Couture y con la que la Princesa causó sensación a su paso por la recepción a los galardonados con el premio Nobel de Química, Física, Medicina, Economía y Literatura en la capital sueca en diciembre de 2018.
El recuerdo al día de su boda
Para complementar su vestido de Zetterberg Couture, Sofia luce sus salones metalizados de Stinaa.J (modelo Denise 2.0) y estrena un clutch de satén rojo, el Vanite de Christian Louboutin. Como joyas, además de un fabuloso collar, rescata por primera vez sus pendientes de oro amarillo, diamantes y perlas de LWL Jewelry, que estrenó el pasado 24 de noviembre de 2021. Sin embargo, llama especialmente la atención su tiara.
En concreto, y como es habitual en ella, se trata de la misma que llevó en su boda con el príncipe Carlos Felipe. Conocida como tiara Palmette, es un regalo que recibió por parte de los padres de su marido y que puede transformarse, pues su estructura de hojas de palma pude lucirse con perlas -como en esta ocasión- o con esmeraldas, brillantes o sin ninguna punta.
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Otra de las presentes a la cena de gala fue Victoria de Suecia. Para la ocasión, la Princesa heredera al trono recuperó su vestido plisado en tono malva y estilo victoriano, de Jennifer Blom, que contrastó con su clutch metalizado de Anya Hindmarch, un accesorio que tiene desde 2013. En su caso, culminó su estilismo con la tiara Cut Steel o Napoleónica. Se trata de una joya que es habitual que luzca. Está confeccionada en acero tallado y latón dorado con motivos de plumas, flores, hojas de roble y bellotas. Perteneció a la reina Hortensia de Holanda y fue introducida en la Familia Real sueca por la reina Josefina. Posteriormente, sería su madre, la reina Silvia, quien la recuperaría.
