Huevos a la flamenca ¡y olé!

También llamados al plato, se preparan al horno y te vamos a contar cómo hacerlo de la manera más sencilla

Por Susana Baticón

Recetas de huevos al horno hay muchas, pero una que en España se ofreció durante años y que no faltaba en numerosos restaurantes con grandísima popularidad, era sin duda la que se conoce como huevos a la flamenca o huevos al plato. ¡Qué recuerdos, con su inconfundible cazuelita de barro sobre esos manteles de cuadritos rojos y blancos! Y qué pena que casi haya desaparecido... Pero no está todo perdido, porque siempre nos queda la alternativa de recuperarla para prepararlos en casa. Y, si no sabes cómo, aquí estamos nosotros para ayudarte.

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¿Qué necesitas para hacer huevos al plato?

Son ingredientes muy sencillos los necesarios para esta elaboración, porque se trata de un plato económico... aunque también puedes encarecerlo si le pones fiambre y embutido ibéricos. Pero vamos a hacer la versión asequible y para ello, lo que vamos a utilizar es lo siguiente:

  • 4 huevos
  • 200 gramos de tomate frito casero
  • 100 gramos de guisantes
  • 100 gramos de chorizo en rodajas finas
  • 100 gramos de jamón serrano en lonchas
  • Sal

Huevos a la flamenca paso a paso

Es una receta para principiantes, que tendrás lista en pocos minutos y que resulta ideal para el almuerzo o la cena. Utiliza una cazuela de barro grande o cazuelitas individuales. También se puede hacer en cerámica refractaria resistente al horno.

  1. Precalienta el horno a 200ºC.
  2. Extiende la mitad del tomate en la base de cada cazuelita de barro.
  3. Añade las rodajas de chorizo y las lonchas de jamón.
  4. Incorpora los guisantes y el resto de la salsa de tomate.
  5. Haz un hueco para cascar dentro el huevo.
  6. Échale una pizca de sal al huevo.
  7. Introduce cada cazuelita en el horno durante 5 minutos o hasta que veas que se cuaja el huevo.
  8. Saca con cuidado ¡y ya los tienes listos!

Nosotros no podemos resistirnos a acompañar esta receta con un buen pan porque nos gusta rebañar bien la cazuelita. ¡Qué gran placer!