De entre las miles de recetas que se pueden hacer con huevo, esta nos encanta. Requiere de cierta destreza -y quizás esté un poco olvidada por ello-, pero el resultado no puede ser más exquisito, sutil y delicado. La mezcla de la bechamel con la yema poco hecha -casi líquida- y el empanado produce en la boca una auténtica explosión de placer gastronómico.
Este año el día Mundial del Huevo, que se celebra hoy 8 de octubre, cumple 25 años y en lugares como el restaurante Cabaña Marconi celebran la versatilidad de este alimento tan completo reivindicando una receta tradicional que se remonta al siglo XIX como son los huevos encapotados y que nosotros queremos mostrarte cómo se elaboran de forma casera.
También conocidos como 'huevos carlistas' o 'huevos al colchón', en la receta que encontramos en el archiconocido libro 1080 recetas de cocina de Simone Ortega se fríen los huevos pero también puden cocerse, eso sí, siempre dejando la yema líquida porque 'la gracia' es que al comerlos, casi 'te exploten' en la boca.
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Ingredientes para preparar huevos encapotados
Los huevos encapotados se hacen con huevos, bechamel espesa y pan rallado y, más concretamente, si los vas a preparar para 4 personas, necesitarás 4 huevos. Para la bechamel: 800 mililitros de leche, 70 gramos de harina, 70 gramos de mantequilla, sal y nuez moscada. Y para el empanado y la fritura: 2 huevos, pan rallado y aceite de oliva.
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Huevos encapotados paso a paso
- Hacemos la bechamel derritiendo la mantequilla en una cazuela, rehogamos la harina y vamos añadiendo la leche, poco a poco, sin dejar de remover para que no se formen grumos. Echamos sal y nuez moscada y dejamos que hierva a fuego lento unos 10 minutos. Retiramos del fuego.
- Como decimos, en la receta tradicional se fríen los huevos, pero también puedes hacerlos cocidos -entre 3 y 5 minutos será suficiente para que la yema quede poco hecha. Si los fríes, recórtalos para darle una forma redonda.
- Lo ideal para que la bechamel se pegue bien es poner papel film en un bol, echar un poco de la salsa, colocar el huevo encima, cubrirlo con más bechamel, envolver con el papel para darle bien la forma y dejar enfriar en la nevera durante 1 hora.
- Los sacamos del frigorífico y los pasamos por huevo batido y por pan rallado y los freímos en aceite caliente hasta que se doren. Los sacamos sobre papel de cocina para eliminar el exceso de grasa ¡y ya tienes los huevos encapotados más deliciosos que te puedas imaginar!
