Ponte en forma y protege el medio ambiente con las tendencias de 'fitness' sostenible

Recoger basura, reducir la contaminación ambiental y otros beneficios de apuntarte al deporte en clave 'clean'

Por Mariana Chacón

Dejar un mundo mejor para nuestros hijos es una filosofía que convence cada día a más personas que esfuerzan por minimizar el impacto que el estilo de vida moderno tiene sobre el entorno. Incluso las marcas se han contagiado de esta conciencia clean y cada vez son más las que apuestan por desterrar el consumo masivo de usar y tirar a través de alternativas reutilizables que reducen considerablemente la temida huella de carbono. La generación 'Z' es uno de los motores por los que se ha impuesto este nuevo modelo de conducta, pues 8 de cada 10 posmilénicos están preocupados por la salud del planeta según una encuesta publicada por la organización Blue Shield of California. Esta inquietud se traduce, por ejemplo, en la responsabilidad con la que diseñan sus rituales diarios, un cuidado que alcanza incluso a las tendencias de fitness

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Cómo organizar una boda sostenible, dónde hay que comprar para apoyar el comercio local, cuáles son las marcas que se han comprometido con reducir la huella de carbono a través de su proceso de producción y distribución... Informarse sobre este tipo de cuestiones es una tarea habitual en el siglo XXI pues es la forma de asegurarse de llevar un estilo de vida respetuoso con el medio ambiente. Como te adelantábamos, esta conciencia sostenible alcanza también a las tendencias en fitness, que cada día se centran más en animar al deportista a cuidar de su entorno en la medida de lo posible con actividades como estas: 

'Plogging', el deporte sueco que limpia las calles

Cuando se une la palabra running (correr en inglés) con la expresión sueca plocka-upp (recoger), nace el plooging. La manera de sumarse a esta inciativa es tan fácil como suena el acrónimo: recoger y tirar al contenedor indicado cualquier desperdicio que se encuentre durante el trayecto de una carrera. Las personas que lo practican se autodenominan "ploggers" y llevan bolsas de basura a mano que suele acabar llenas, lo que además de eco-responsable también ayuda a potenciar el trabajo de fuerza durante el transcurso de esta actividad que nació en Estocolmo y más tarde se extendió al mundo entero. 

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El 'power walking' que reduce las emisiones 

Ya son muchos los estudios que han demostrado los beneficios a nivel cardiovascular de caminar, incluso si se practica a intensidades moderadas. Sin embargo, cuando se aprieta el paso y se alarga el tiempo que dura la carrera, entonces estos paseos se convierten en una sesión de fitness en toda regla que ayuda a adelgazar, tonificar los músculos, aumentar la capacidad pulmonar... Con todas las propiedades del power walking (del inglés, caminar con energía) en mente, aprovechar las caminatas para transportarse de un sitio a otro también minimiza las emisiones de humos negros al dejar el coche aparcado en casa. Como guía para saber a partir de qué momento el mero acto de andar de un sitio a otro genera un impacto notable sobre la condición física, según un estudio publicado en The Journal of Nutrition hacerlo de 20 a 30 minutos cada día es lo recomendado para quienes lleven un estilo de vida sedentario. 

Entrenamientos al aire libre

Tanto el plogging como el power walking son actividades que se practican al aire libre y ambas tendencias favorecen la reducción en el gasto energético derivado de la práctica de deporte dentro de instalaciones cerradas. Como alternativa para aquellas que prefieran esta última opción, los gimnasios ecológicos en los que la maquinaria, los accesorios de fitness e incluso la manera en la que se genera energía para abastecer el establecimiento tienen sello eco-friendly. ¿El primero en España? El centro madrileño Move Watts que aprovecha el movimiento que generan sus usuarios al hacer deporte para cubrir el gasto energético del edificio y al que esperemos que sigan muchas otras alternativas sostenibles al entrenamiento indoor