Las Fuerzas Militares de Colombia han encontrado con vida a los cuatro niños que durante 40 días han permanecido en paradero desconocido en la selva. Así lo ha confirmado el presidente Gustavo Petro. “Una alegría para todo el país. Esos niños son hoy los niños de la Paz, un ejemplo que quedará para la historia”, ha expresado en su perfil público junto a una fotografía en la que se puede ver a los pequeños arropados en mantas térmicas junto a los soldados que han efectuado el rescate.
El mandatario ha declarado que los pequeños presentan deshidratación y picaduras de mosquitos por todo el cuerpo. Además, para evaluar su estado de salud (física y mental) han sido trasladados al hospital local de San José de Guaviare donde recibirán cuidados médicos y también se les hará un seguimiento para prevenir cualquier tipo de complicación en el futuro. Tras pasar los controles médicos irán a Bogotá o Villavicencio.
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Los hermanos Lesly, Soleiny, Tien Noriel y Cristin, de trece, nueve, cuatro y un año respectivamente, son los protagonistas de una auténtica historia de supervivencia. El pasado 1 de mayo, los niños viajaban en una avioneta junto a su madre y otros dos adultos. De repente, el motor del vehículo comenzó a fallar cayendo sobre el río Apaporis. Antes de estrellarse, el piloto pudo avisar a la torre de control del fallo.
Cabe destacar que la avioneta ya había presentado problemas técnicos en el pasado, teniendo otro accidente en julio de 2021 en Vaupés en el que no se registraron muertos. Para abaratar gastos, el aparato fue reparado sin consultar con Cessna, la casa fabricante. Los niños se embarcaron en este transporte para reencontrarse con su padre y el resto de su familia en Araracuara, población donde se habían refugiado tras recibir amenazas de muerte de la guerrilla.
17 días después de la fatal tragedia, las autoridades encontraron sin vida los cuerpos de los tres adultos. Sin embargo, no había rastros de los niños, lo que alimentó la esperanza de que estuviesen vivos. Para encontrarlos se desplegó un gran dispositivo de rastreo, en el que han participado tanto militares de las fuerzas especiales como ciudadanos de la comunidad indigena.
Finalmente, tras un mes de búsqueda incesable, el milagro se ha producido y los cuatro niños han sido hallados en la verdera Palma Rosa, a tan solo cinco kilómetros de donde cayó la avioneta en la que viajaban. Se cree que la clave de su supervivencia ha sido los conocimientos sobre la selva que los dos hermanos mayores atesoraban, ya que los propios pequeños pertenecen a una población indigena.
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