El rey Juan Carlos I, que el próximo 5 de enero cumplirá 80 años, ha reflexionado sobre varios aspectos de su vida en un reportaje en El País Semanal centrado en su regreso al mundo de la vela tras su abdicación, en el que "no entra la política", aunque, según precisa "la sigo de cerca, es algo que va dentro de uno", según recoge Efe.
Cuando faltan tres semanas para que cumpla 80 años, el suplemento del periódico ha hecho un perfil basado en los testimonios del rey y de quienes le acompañan en su regreso al mundo de la competición náutica al frente del nuevo Bribón, con el que ganó en septiembre en Vancouver el mundial de vela en la calse 6mR. En la publicación también se señala que don Juan Carlos "permanece al tanto de la actualidad. [..] En sus círculos más cercanos, alude a sus dotes negociadoras, puestas en práctica durante momentos cruciales de la Transición, recalcando la importancia de dicha cualidad para la resolución de conflictos". Sobre esta cuestión el rey Juan Carlos aclara: "Algo que también sucede cuando estamos navegando es que aquí no entra la política; por supuesto, la sigo de cerca, es algo que va dentro de uno".
Sobre su gran pasión por el mar, heredada de su padre, el monarca asegura que "el mar es la libertad" y reconoce que "la competición siempre ha sido lo que más me ha gustado. Siempre he sido muy competitivo. En el deporte y en la vida", según recoge Efe. "Volver me ha hecho comprobar que, si uno quiere, uno puede", recalcal sobre su regreso a la competición náutica después de varias intervenciones quirúrgicas en los últimos años de su reinado que le obligaron a renunciar a la Copa del Rey de Vela en Palma de Mallorca. "He necesitado mucha preparación. Tengo que entrar y hacer mucho ejercicio antes de subirme al barco. Regresar no ha sido fácil. Pero ha merecido la pena", relata.
Algunos de sus compañeros de navegación como Ib Andersen, que ya entrenó a don Juan Carlos para los Juegos Olímpicos de Munich en 1972 también le acompañó el pasado septiembre en su triunfo de Vancouver, señala en el artículo que lo que más admira de él es su "capacidad de hacer equipo", como regatista "pero también como rey". Don Juan Carlos también explica que "volver a regatear, más allá de ganar el mundial de Vancouver, supone sentirme otra vez parte de un equipo", y argumenta: "La navegación siempre ha sido una pasión a la que hoy puedo dedicarle más tiempo, y soy el patrón de este barco, pero también formo parte de un equipo".
Lo cierto es que desde su abdicación, que fue anunciada el lunes 2 de junio de 2014 y se hizo efectiva semanas después el histórico 19 de junio de ese año, don Juan Carlos se ha volcado en la navegación, la gran pasión que ha heredado de su padre. También ha aprovechado para hacer rutas gastronómicas, viajes a Galicia y reunirse con amigos. Así, le hemos podido ver 'rendido' ante los encantos del mejor cocido de España, o ante una paella de domingo.
