Ha sufrido durante tres meses el hambre, la ausencia de su pareja y las penurias que suponen convertirte en una 'Superviviente' pero Laura M. Flores está disfrutando a su vuelta de Honduras de unas merecidas vacaciones junto a su novio, el cocinero Benji Aparicio, que tiene en la capital su restaurante Noname bar de comida fusión asiatica-mediterráea.
La pareja, que se conoció el pasado verano, comenzó sus vacaciones a finales de julio en Ibiza, lugar en el que coincidieron con sus amigos Javier Hidalgo y Sol González, padres de una niña de tres años llamada Camila.
Sonrientes y muy enamorados, la pareja no ha tenido reparo a la hora de compartir su amor en redes sociales, donde en sus respectivas cuentas oficiales han mostrado algunas románticas imágenes. "24 horas al día ♥️", escribía el joven cocinero junto a una imagen en la que aparecen abrazados y él besándola en la mejilla. "Todo♥️" reflejaba ella días después en su perfil.
Tras ello, la pareja viajaba a la paradisiaca isla de Bali, donde actualmente se encuentra. En la playa de Canggu, tomando algo en el Rooftop Sunset Bar del hotel de lujo Double-Six o en el espectacular templo de Uluwatu, Laura ha capturado algunos de los momentos más mágicos de este especial viaje. "Tú y punto. Nada más", escribía la hija de Kiko Matamoros y Marián Flores.
"No soy una mujer que necesite mucho para tener una vida perfecta. Lo único, tener una rutina diaria para dedicarme a mí y a mi trabajo, tener cerca a mis amigas y, como te decía, formar una familia en un futuro", confesaba la sobrina de Mar Flores hace unos meses.Una perfección que va llegando poco a poco de la mano de su chico y de estos viajes tan impresionantes.
